La colección «Agus y los monstruos» se sitúa a medio camino entre la novela gráfica tradicional y el cómic infantil. En cada página encontramos tres niveles de lectura que se convierten en independientes y, al mismo tiempo, complementarios.
- El texto narra la historia en primera persona: es el mismo Agus quien cuenta los hechos.
- Los bocadillos contienen los diálogos, pensamientos y actitudes de los personajes,
- y la ilustración acompaña y muestra los acontecimientos con todo tipo de detalles, lo que permite generar hipotesis e inferencias.
Los tres niveles de lectura hacen que «Agus y los monstruos» interesen a muchos niños y niñas que no se habían acercado nunca a la lectura o que rehuían de ella. Con frecuencia les parece que es más fácil, que la pueden seguir mejor y incluso les confiere una sensación de triunfo lector, porque son capaces de entender la historia y acabar el libro. Es por eso que resulta también muy motivadores y enriquecedores para los niños y las niñas que son ya lectores avanzados.
Así, entonces, las historias de «Agus y los monstruos» son ideales para hacer que todos los niños y las niñas de la clase se interesen por la lectura, sea cual sea su competencia lectora, lo cual facilita mucho la labor educadora y la motivación en el aula. Aún cuando la colección se dirige a niños y niñas de entre 8 a 11 años, se ha comprobado que despierta el interés tanto en primeros lectores como en lectores expertos.
Este formato a medio camino entre novela gráfica y cómic infantil, además, invita a la relectura a medida que progresa el nivel de descodificación y competencia lectora, tal como hacen Agus y sus compañeros de aventuras, que también releen las obras que se comentan en los libros. Alicia en el país de las maravillas, Peter Pan, Cyrano de Bergerac y otros clásicos que aparecen citados de forma recurrente en muchos títulos de la colección.